Desde su debut homónimo reinaba el silencio en la tumba, pero no podía durar mucho más y antes de terminar el pasado año, SEPELIO OCULTO vuelve con un nuevo trabajo bajo el brazo titulado “Viviendo bajo tierra”.
Tras las macabras palabras de El gato negro, una siniestra intro cinematográfica comienza a sonar Viviendo bajo tierra, el tema que da nombre al redondo. Es un corte instrumental pausado y de sonido denso y saturado, que conforme avanza va creando una intensa expectación sobre lo que vendrá después. Donde el bajo y las notas mantenidas juegan un papel protagonista.
Parte de la oscuridad sin embargo apuesta por un sonido rápido y enérgico, dándolo todo en el doble bombo, y donde escuchamos las primeras líneas vocales propias de la banda, las cueles suenan rasgadas, no apostando por la potencia sino por la agonía contenida, y en castellano. Algo poco frecuente para el black metal vieja escuela que facturan, pero que desde luego, es de agradecer.
El siguiente en sonar es El día de nuestro funeral, un tema donde las guitarras ganan protagonismo con riff sencillos pero efectivos, muy atmosféricos en las partes más relajadas, pero que no dudan en recrudecerse en los momentos necesarios.
La senda del dolor, es el último tema, siendo algo más mesurado que sus predecesores, pero no por eso menos intenso. De hecho incluye un juego de doble voz que lo hace muy interesante. Porque desde luego, las líneas vocales son el punto fuerte de este corte.
De forma general decir, que esta segunda oda al dolor, es una mejora palpable en el sonido de la banda, el cual es analógico al cien por cien, ya que en la grabación no se han usado ordenadores. Increíble a día de hoy, pero cierto, y no por ello su sonido se ve mermado, todo lo contrario, lo dota de una sonoridad propia.
Por otro lado, aunque los temas fueron grabados durante 2013, todos ellos han sido compuestos entre 2006 y 2009, por lo que se nota la madurez de las canciones en los sonidos medidos y meditados.
La única y auténtica pena es la duración de la grabación, apenas quince minutos, que hace que cuando te adentras de pleno, está terminado. Pero como dicen, lo bueno, si breve, dos veces bueno.
Formación:
- Dante: Voz, coros
- Fran J. García: Batería, bajo, coros
- Juan Miguel Mendoza Buendía: Guitarras