Decir once años para un festival, no es poco. Once años repartiendo dosis brutal de Grindcore, Death, Brutal Death en el rincón mas sureste de la península, donde los invernaderos blancos dejaron paso al rojo sangre, al rojo de la pasión, el rojo del Metal Extremo. Tres grupos franceses, MERCYLESS, INFEST y PUTRID OFFAL, otros tres grupos de El Ejido, la cuna del Grind/Death de Andalucía, ONOMASY, RENCOR y TORSO, y los brutalísimos CEREBRAL EFFUSION llegados desde Euskadi, nos prepararon la ración más enfermiza que llevaban en lo mas profundo de la enfermedad mental extrema.

Como es habitual en la Sala Jala Jala, el horario es sagrado, así que TORSO se puso a la faena a las 17’00 h para que fuéramos entrando en ambiente. Un ambiente que aún era frío, pues la gente aun no terminaba por entrar a la sala, pero rápidamente se encargaron de calentarlo, con el EP debut «Fosa Común». Grindcore en sus bases rítmicas con una voz muy gutural y profunda, que nos dejaron un buen arranque de festival.

Caza Humana, Masacre en la Verbena, Eutanasia, Vomitando Bilis son algunas de las canciones de su EP con las que nos hicieron vibrar de lo lindo. Si a ello le sumamos la versión Torso, de los tristemente desaparecidos MACHETAZO, mas unos títulos nuevos que nos presentaron, La Ley del Monte, Alimañas, Violencia Carnal y A Las Armas hicieron de su concierto un autentico festín de Grind/Death. Gran grupo, muy compacto y que gozaron de buen sonido, en el que dejaron más que un gran sabor de boca. Enhorabuena.

Con cuenta gotas iba entrando el público, para la hora del Grindcore rabioso y salvaje de RENCOR, en el que esta vez no fue acompañado del todo por el sonido, pues la voz de Binky (GENOFAGIA) apenas tenía toda la nitidez necesaria.  30 canciones en apenas media hora, he aquí la definición perfecta del grupo, donde Binky es un torbellino sobre el escenario, en el que no sé cómo no se rompe en algunos de los movimientos. A su vez Pitu (LAPIDATED) era un show verlo sobre la batería, poniéndose de pie y animando al público para que se viniera arriba. Al lado de ellos Voro a la guitarra, inquieto sobre su posición acribillándonos con sus riff rápidos y despiadados.

Mención para Mario, vocalista de HIMURA, que subió a cantar la canción  Indefensión Aprendida, una colaboración de lujo en un concierto exprimidor, irascible y furioso que nos dejaron los de El Ejido. Grindcore no acto para cardíacos.

Era el turno de PUTRID OFFAL, medicación de Death/Grind. Vestidos como médicos ensangrentados nos destrozaron la cabeza a base de rítmos veloces y cortantes, en donde aparecieron los primeros Headbanging y Moshes entre el público. Tras su reaparición en 2015, los franceses sacudían de nuevos los escenarios comandados por el médico jefe Franck Peiffer a las voces, que no paro de moverse sobre el escenario, acompañado por el esquizofrénico Frédéric, no había nada mas que verle la cara!!, a las cuatro cuerdas, el cirujano Phil a las seis cuerdas y el doctor explosión, Laye, que se marco un concierto impecable sobre la batería, estuvo genial.

PUTRID OFFAL vino a presentarnos su primer larga duración de su carrera, «Mature Necropsy», en el que nos deleitaron con un material exquisito. Purulent Cold,  Suffering, From Plasma to Embalming o Mortuary Garlands. Son algunos temas que nos dejaron un buen derroche de energía, de un Grind/Death de alta calidad que el público agradecía en cada uno de los temas. Un público que cada vez estaba más apasionado según iban pasando el tiempo. Los franceses fueron capaces de mantener con vida a los pacientes.

Los siguientes en salir al escenario fueron MERCYLESS, que nos deleitaron con su Death Metal de la vieja escuela. Su concierto fue serio, muy serio, aunque salió a relucir el mal sonido que a veces tiene la sala, sobre todo la voz de Max Otero, que hablaba en un perfecto español, que en ocasiones no se apreciaba como era debido.

Era la primera gira que hacían por España y además nos venían presentando su último álbum, «Pathetic Divinity», aunque con el poco tiempo que tenía cada grupo para las actuaciones, unos de 30 a 40 minutos, pocas canciones nos obsequiaron de este último LP. Christianist, Eucharistic Adoration y Pathetic Divinity fueron las únicas, así que el resto fueron tirando de sus anteriores LP’s. God Is Dreaming e Infamy, también de su nueva etapa, hacían resaltar los Headbanging, para pasar a sus temas más antiguos como Substance of Purity y Without, de su primer retoño «Abject Offerings», pura esencia del Death Metal. No quedo la cosa ahí, ya que para finalizar nos regalaron una pedazo de versión de ASPHYX, Deathhammer como colofón del pedazo de concierto que hicieron.

Me duele, me duele muchísimo tener que hablar del concierto de ONOMASY. No sé muy bien de quien sería la culpa, si del grupo, de la etapa de sonido que estaba jodida, o del técnico de sonido. El caso es que tras el brutal concierto que hicieron en Alicante en el I TITÁN FEST, apenas tres semanas antes, no puedo decir lo mismo. El sonido fue malo? no, lo siguiente, pésimo, el resultado? que solo se oía la guitarra de Armando y la batería de Samuel excesivamente alta. La otra guitarra de Pablo y el bajo de Mario prácticamente es como si no estuvieran. Y la voz de Álvaro? aparte de que se oía con eco… bueno solo se oía eso.

Viendo las caras de los componentes lo decían todo, sabían que no estaban sonando bien, y ONOMASY necesitan sonar bien, porque calidad me han demostrado de sobra que tienen y que con un buen sonido arrasan donde toquen. Por lo que respecta al set list, estuvo basado en su primer LP «Ashes and Dust», tocando temas como Advantage of the Disadvantage, I Am, The Jailer of the Lives o la impresionante Digging up the Moon. Aunque el público estuvo algo frio durante la actuación, bien que hubo algún Headbanging y algún Mosh. ONOMASY se que no es esto. Lo que me decepciono no fue el grupo, si no el sonido pésimo.

Por suerte todo cambio de dirección, faltaba lo inesperado, o más bien lo esperado en un festival del calibre que había. Lo pudimos comprobar primero con los franceses INFEST, desde que empezó a sonar Me & My 24 Inches Rims la locura se desató en la sala, creando moshes y pogos prácticamente en toda la mitad de la sala. Todo cambio, el sonido volvía a la normalidad y la fiesta continuaba de una manera significativa, donde aparte de los moshes también había saltos desde el escenario de un público que se lo estaba pasando en grande.

A INFEST se le contagio y hizo un conciertazo, sonido claro y muy compactos, el Grindcore de los franceses recorría la sala de una punto a otra, Badtrip, Crastination, Back to the Basic o Mr. Polka fueron algunas canciones de locura que se vivió en Almería. Fue impresionante el delirio y la fiesta que INFEST nos dejo a su paso por el Brutalmeria 2016.

Faltaba la puntilla final, y de eso se encargo y bien los vizcaínos CEREBRAL EFFUSION. Si ya con INFEST fue una fiesta, con los vascos fue la destrucción en el estado más puro de la fiesta. Moshes, circle pist y pogos invadieron la sala de principio a fin. Atónitos se quedaron Kosme y compañía, que en ocasiones se vieron en algún que otro aprieto cuando el público se subía al escenario.

Y es que no es para menos, CEREBRAL EFFUSION te hace saltar la cabeza, destrozar el cuello a base  de Brutal Death de precisión y calidad. Hicieron un concierto prácticamente perfecto, sonido claro y contundente en el que cada componente del grupo se vaciaron en ello, no paraban contagiando al público que se tomo la fiesta al más puro estilo salvaje, donde el colofón final fue la invasión completa del escenario donde no cabía un alfiler, llegando a ser algo incomodo para el grupo, donde Pe tuvo que pegar algún empujón que otro para poder seguir tocando. Impresionante concierto y fiesta final el que se produjo en el XI BRUTALMERIA FEST.

Otro año más el Brutalmeria fue una gran fiesta, una tierra donde el Metal Extremo fluye por las venas de los autóctonos y donde año tras año se va haciendo hueco para ser una cita obligada. Dar las gracias a la organización por portarse a las mil maravillas y llevar los horarios a rajatabla. A Pedro Hecatombe y a Antonio José por las facilidades y comportamiento que siempre tienen con nuestro equipo. La nota negativa fue el sonido, que no todos los grupos lo tuvieron de igual calidad, no sé bien de quien será la culpa, pero el Metal Extremo necesita buen sonido y en ocasiones no lo hubo. Brutalmeria Forever.

Crónica:

Fotos:

Galería TORSO:

Galería RENCOR:

Galería PUTRID OFFAL:

Galería MERCYLESS:

Galería ONOMASY:

Galería INFEST:

Galería CEREBRAL EFFUSION: