Con el paso de los años me he vuelto exigente a la hora de escuchar Black Metal, porque parece que la tendencia actual no es del todo de mi agrado, por eso, es toda una alegría encontrarse con proyectos como INCORPOREA, donde no prima la velocidad o el gutural facilón y desmedido, si no donde se recuperan las atmósferas, los bueno ritmos y la lúgubre esencia que jamás se debió perder.
En este “To Exorcize the Sun” INCORPOREA nos deja dos temas Carved in Paroxysmal Void y Frigid Caress of Ivy. Si, solo dos, pero en pocas ocasiones podréis escuchar dos canciones que den para tanto, han exprimido cada minuto para mostrar al oyente un amplio abanico de sonidos y estructuras que no defraudará a los seguidores del Atmospheric Black Metal hasta el Doom Metal.
Aunque Carved in Paroxysmal Void comienza como una mordida en la yugular con un desgarrador grito, una batería implacable y unos riffs de guitarra a toda velocidad, pronto migran a un sonidos más pausado y atmosférico, tétrico e inquietante generado en buena parte por unos ritmos de guitarra muy bien elegidos. Aunque dentro de la propia canción se dan una sucesión de cambios de ritmos, que sin perder la cohesión, sorprenden y hacen que no pierdas el interés, ni se haga repetitivo al oído.
En Frigid Caress of Ivy apuestan por comenzar directamente con la faceta más lenta y ambiental, mucho más Depressive. Donde las cartas mejor jugadas, son la envolvente del bajo, el desdoblamiento de voces y el juego de platillos de la batería.
Dos canciones que como decía más arriba dan para mucho, pero que sin duda, dejan con ganas de más. Intentaré no perderle la pista a INCORPOREA, porque sin duda tienen mucha calidad que ofrecer.
La banda, está compuesta por D. Bloodless a las labores de guitarra, bajo y voz y Damastor a la batería.