Fue una tarde de Miércoles, cuando cogí el bus a Murcia para asistir a lo que iba a ser, una batalla vikinga o quizá una fiesta folclórica… En todo caso ya iba preparado para la ocasión con el kilt puesto….
Era todo un lujo el hecho de poder ver en directo a estos tres grupazos extranjeros, en pleno territorio murciano. Todo indicaba que iba a ser una velada llena de gente y buena música. Sigue leyendo